De mí, que soy una Santa,
que temo la ira de Dios,
que me reinvento con cada tic-tac...

miércoles, 7 de octubre de 2009

sintítulo

Es estúpido intentar escribir esta noche. No he podido hacerlo hace ya varias y no encuentro un pretexto lo suficientemente convincente para hacerlo. Tampoco hay alguno de la misma condición para prohibirlo.


Me aferro, lo sé... Soy una necia, también lo sé... [Es curioso SABER que las-mis CERTEZAS se extiendan de este modo insustancial, aberrante entre mis dedos.]


No pretendo culpar a Larra por haberme sumergido en esta atmósfera inválida y solitaria que necesita un brazo largo para llorar a gusto. Tampoco quiero ir y venir de nuevo a los/por los subterfugios húmedos que se presentan en mis ojos. No deseo lanzarme a la breve caminata hacia la cocina y tomar la única botella de whisky que ha quedado intacta después del cataclismo [aquel cataclismo], ver como precipitadamente el contenido se vierte en un vaso de cristal con hielos y disculparme después por las faltas cometidas ante un ruido de aparato telefónico. No necesito volver sobre las huellas que de sobra conozco y reconozco a medida que me alejo y me re-alejo de esto que, sin lugar a dudas, es tuyo-mío.


[No, no... No estoy triste y no, tampoco, lloro... Sólo me AFERRO, sólo soy una NECIA.]


No mataré el tiempo, dibujándome ramas de árbol seco en los brazos y no jugaré una vez más a prenderle fuego a los recuerdos, a los retratos, a las confesiones de media noche, al espacio que ocupas/desocupas cuando duermes.


“ME HACES FALTA”, es algo que grito inconscientemente cuando te miro y estoy callada. “TE EXTRAÑO”, es algo que digo en voz baja cuando estás aquí y aún siento el desprendimiento de un pedazo de mi piel cuando te marchas.


Es irremediablemente estúpido escribir esta noche: sé que dentro de algunas horas estarás maldiciendo en murmullos y suspiros el pretérito que con cada palabra has derruido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario